En Nicaragua se aprobó ayer por unanimidad y con carácter de urgente una nueva ley que impone penas de cárcel de hasta 5 años a quienes publiquen en redes sociales contenido considerado desfavorable por el régimen y de hasta 10 años para quien “promueva odio o ponga en riesgo la estabilidad económica y social”.

La nueva legislación establece penas de tres a cinco años de prisión, además de multas, para quienes difundan información en redes sociales, dentro o fuera del país, que provoque "alarma, temor, pánico o zozobra" en la población. 

Aunque si el contenido es considerado “promotor de discriminación, odio, violencia o si se estima que pone en peligro la estabilidad económica, social o el orden público”, las penas podrían ascender de 5 a 10 años de cárcel.

El gobierno argumentó que la ley “fortalece la prevención, el enfrentamiento, la investigación y la judicialización de los delitos a través de los sistemas informáticos, nuevas tecnologías y redes sociales”. Sin embargo, la oposición criticó la medida, calificándola como una "ley mordaza" destinada a silenciar a la disidencia.

Sin definición de conceptos clave

La Ley que cuenta con 48 artículos y 25 definiciones, no define claramente conceptos clave como “información falsa” o “información tergiversada”. 

Esto ha generado preocupación, ya que el sistema judicial tendrá la última palabra para determinar qué es considerado información falsa o provocadora de alarma, advirtió el movimiento Periodistas y Comunicadores Independientes de Nicaragua (PCIN).

Desde las protestas antigubernamentales de 2018, el gobierno del presidente Daniel Ortega ha implementado una serie de medidas destinadas a controlar los contenidos críticos en el país. 

En 2020, se aprobó la primera ley de ciberdelitos, que resultó en el arresto de varios periodistas y opositores por “propagación de noticias falsas”.

Recientemente, el Parlamento aprobó una reforma al código penal que establece condenas de hasta 30 años de prisión y la confiscación de bienes por delitos contra el Estado.

(Con información de AFP y EFE)