Los periodistas de vanguardia son quienes cuestionan al poder, visibilizan temas de corrupción y cuestionan al Estado; por lo tanto necesitan protección de organizaciones, medios y autoridades, alertó Joel Simon, director ejecutivo del Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ).

En el capítulo capítulo Defending Vanguard Journalists de Joe Simon publicado en el libro Media Capture bajo la coordinación de Anya Schiffrin, el autor plantea la necesidad de creación de redes nacionales e internacionales para proteger a los periodistas que se atreven a visibilizar información que es incómoda para otros.

El texto inicia narrando la amistad que tenía Joel Simon con Jesús Blancornelas, a quien expresa su admiración y reconoce su sentido desafiante al crear su medio. El Semanario Zeta no se sometió al control del papel del Estado mediante la empresa PIPSA, sino que cruzaba la frontera entre México y Estados Unidos para hacerlo y lo distribuía en talleres mecánicos o taquerías; evitando así lidiar con los kioscos donde se repartía la prensa convencional.

El semanario Zeta tenía una estructura para operar fue del sistema, Jesús Blancornelas y Héctor “El Gato” Félix Miranda en 1980, adoptaron el lema “Libre como el viento”. Esto los convirtió en blanco de ataques. En 1988 fue asesinado ?Héctor Félix bajo las órdenes de ?Jorge Hank Rhon, hijo de un político a quien se le había encontrado vínculos con el narcotráfico. Tiempo después fue atacado el propio director quien seguía publicando temas de denuncia, pero fue salvado por su guardaespaldas Luis Valero, quien recibió el impacto de bala.

Por otra parte, Joel Simon deja evidencia de cómo Javier Valdez se empeñó a seguir reporteando desde Culiacán, Sinaloa, pese a que CPJ lo motivó a salir del país. El periodista dijo que tenía trabajo que hacer para informar a su ciudad, su país y el mundo. “Veía este trabajo como una responsabilidad a la que no podía dar la espalda”, distinguiéndose así como un periodista de vanguardia para Joel Simon, director ejecutivo del Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ).

Para Simon tanto Javier Valdez, Jesús Blancornelas, Héctor “El Gato” Félix Miranda, Miroslava Breach, Patricia Mayorga, entre otros, fueron y son periodistas de vanguardia, ya que se atrevieron a narrar información explosiva que otros temieron tocar. Más en un escenario donde la información es repetitiva. “Los periodistas trabajan en manadas, persiguiendo la misma historia”, ésta llega a distinguirse por la elegancia de la redacción o el sentido crítico, apunta el defensor de la libertad de expresión.

El directivo del CPJ registra que abordar temáticas periodísticas relacionadas con el narcotráfico y crimen organizado ha sido de gran riesgo para los periodistas en México, como paso con Miroslava Breach, quien se atrevió a publicar informes sobre violaciones de derechos humanos, corrupción y tala ilegal; los cuales publicaba con Patricia Mayorga, quien tuvo que exiliarse de país para seguir publicando, aunque ha dicho que no es lo mismo narrar desde fuera.

En este capítulo, Joel Simon traza algunas líneas de la red de impunidad que existe en México, que permite el asesinato de periodistas y su intimidación, lo que afecta a libertad de expresión y por ende, a la democracia. Como lo acaba de denunciar un grupo de medios en México que se pronunciaron contra las amenazas que le hizo el Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), el 9 de agosto del 2021, a la comunicadora Azucena Uresti, por la cobertura de temas de inseguridad en Michoacán.

Simon pone el foco en los periodistas independientes y los vanguardistas quienes se atreven a narrar temas incómodos, pero muchas veces están desprotegidos. Entonces, ¿qué hacer frente a un escenario aterrador para los periodistas? ¿Cómo podemos seguir instando hacia la libertad de expresión?

El defensor por la libertad de expresión ha señalado que una forma de mantener a los periodistas más seguros es creando estructuras que los apoyen y crear una red a nivel nacional e internacional. Entre los esfuerzos más exitosos de la organización está el Consorcio Internacional de Periodistas de Investigación (ICIJ), editores de los Panama Papers y Paradise Papers, donde participaron organizaciones de medios de todo el mundo para publicar en conjunto estos documentos.