Baja paga, múltiples empleos y salud mental debilitada, son algunos de los principales retos que enfrentan los periodistas freelance en el mundo, ante los cambios por los que atraviesa el sector.
En un artículo publicado por The Reuters Institute, la periodista Gretel Kahn, detalló el panorama de la industria periodística, que encara el cierre de medios y despidos masivos de periodistas, las crisis de las nuevas empresas de noticias y las caídas de los ingresos, sumado al riesgo de que la inteligencia artificial comience a sustituirlos.
Al entrevistar a 25 reporteros de 20 países que compartieron sus dificultades, Kahn destacó el deterioro de las condiciones laborales de la profesión, agudizada desde las posiciones temporales e independientes.
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Baja paga
Kahn explicó que si bien es difícil hacer un seguimiento de las tarifas del periodismo freelance a lo largo del tiempo, muchos de los periodistas le expresaron cierto descontento con las tarifas ofrecidas, las cuales muestran estancamiento, en tanto la inflación no para.
“Hace unos 10 años, noto que los medios no te quieren pagar y te quieren vender la idea de que vas a asociar tu nombre con el prestigio de una gran marca”, dijo a Kahn, Nubia Rojas periodista de Colombia, que tiene más de 18 años trabajando como freelancer, sobre todo para medios internacionales.
En las entrevistas que Kahn realizó, Rojas y varios periodistas más expresaron que se emplean en otros puestos, además del periodismo.
Múltiples empleos
A medida que el mercado laboral del periodismo sigue achicándose, con cifras récord de despidos, los puestos de trabajo bien remunerados son más difíciles de conseguir.
Periodistas con décadas de experiencia y artículos a su nombre tienen que complementar sus ingresos con otras ocupaciones.
Salud mental frágil
Al aceptar múltiples empleos para compensar la baja paga, periodistas freelance destacan que enfrentan retos de salud mental, debido a múltiples problemas: la inestabilidad financiera, la incertidumbre, el rechazo constante y el ajetreo interminable.
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