La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) denunció las expresiones de funcionarios del gobierno de México contra el trabajo de Diario de Yucatán. La organización alertó además del peligro de la actitud de descrédito hacia la prensa que predomina entre autoridades, políticos y figuras públicas de la región.
Desde finales de abril ocurrieron varios incidentes en los que funcionarios han intentado desacreditar el trabajo de Diario de Yucatán. Los ataques se produjeron tras la publicación de un reportaje del periodista Joaquín Chan sobre los problemas de salud del presidente Andrés Manuel López Obrador durante una visita a la ciudad de Mérida, en el estado de Yucatán.
El 23 de abril, el secretario de Gobernación, Adán Augusto López Hernández, cuestionó la profesionalidad e integridad del periódico. Al día siguiente, el director del Sistema Público de Radiodifusión del Estado Mexicano, Jenaro Villamil, continuó con las acusaciones, afirmando que Diario de Yucatán sustituyó el "vacío informativo" con especulaciones sin verificar sobre la salud del presidente. Villamil hizo su declaración a pesar de que el presidente confirmó que se había desmayado durante el viaje.
El presidente de la SIP, Michael Greenspon, rechazó "los ataques despectivos contra el periódico por informar sobre un asunto de interés público como lo es la salud del presidente". Greenspon, director global de Licencias e Innovación de Impresión de The New York Times, expresó su "apoyo y aprecio al periódico", que celebrará su 98º aniversario el 31 de mayo.
Carlos Jornet, presidente de la Comisión de Libertad de Prensa e Información de la SIP, reiteró el apoyo de la organización a Diario de Yucatán y advirtió que "denigrar la labor de la prensa y de quienes investigan a los poderosos puede tener consecuencias negativas y fomentar la intolerancia".
Greenspon y Jornet subrayaron que, como se afirma en las conclusiones de la reunión semestral de la SIP, "la estigmatización y degradación pública de la prensa también es un fenómeno extendido entre presidentes y altos funcionarios" de las Américas. En México, en particular, las actitudes hostiles hacia los periodistas y los medios de comunicación son comunes.
La SIP aprobó una resolución que recoge los países donde se presentaron casos de estigmatización en los últimos meses e insta a "los gobiernos de las Américas a garantizar que el debate público se maneje con respeto, tolerancia y en el marco de los principios de libertad de expresión".