Human Rights Watch acusó a las autoridades venezolanas de ejercer una brutal represión y cometer violaciones generalizadas de derechos humanos contra manifestantes, transeúntes, periodistas, líderes de la oposición y críticos del gobierno tras las elecciones presidenciales del 28 de julio de 2024. 

“La represión que estamos viendo en Venezuela es brutal”, afirmó Juanita Goebertus, directora de la División de las Américas de Human Rights Watch. 

“La comunidad internacional debe tomar medidas urgentes para garantizar que los venezolanos puedan protestar pacíficamente y que su voto sea respetado”, agregó.

La organización expuso en un comunicado que los gobiernos preocupados por la situación en Venezuela deben exigir la verificación independiente de los resultados electorales y apoyar los esfuerzos internacionales para garantizar justicia.

Lea el comunicado completo en el enlace.

Anulación de pasaportes

El gobierno también ha intensificado sus tácticas represivas, cancelando pasaportes de críticos del gobierno para evitar que salgan del país, llamando a la ciudadanía a denunciar a manifestantes y realizando redadas abusivas, especialmente en sectores populares. 

Desde las elecciones, las autoridades venezolanas han cancelado pasaportes de críticos, dirigentes políticos y periodistas independientes, en lo que parecen ser esfuerzos dirigidos a castigarlos e impedirles salir del país.

Las autoridades también han cancelado pasaportes de personas que ya se encontraban en el exterior. 

Human Rights Watch recibió información sobre seis casos, incluyendo periodistas en Venezuela y en el extranjero y sus familiares, que se enteraron por el sitio web del Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería (SAIME), la institución gubernamental que expide los pasaportes, que sus pasaportes habían sido anulados.

La página web no indicaba motivo alguno para dicha anulación.

El 15 de agosto, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos informó de 36 casos similares.

"El número total puede ser mayor, ya que varios defensores de derechos humanos dijeron a Human Rights Watch que preferían no comprobar la vigencia de su pasaporte en el sitio web por temor a que las autoridades pudieran considerar esa búsqueda como una actividad sospechosa", explicó la organización.