Entre los múltiplos retos y constantes cambios que enfrenta el periodismo, una cosa es constante: la importancia del periodismo de calidad, expuso Anya Schiffrin, directora de la especialización en Tecnología, Medios y Comunicaciones de la Universidad de Columbia.
En entrevista con Gastón Roitberg de LA NACION, de Argentina, Schiffrin, ahondó en que en los últimos años, nuevos métodos de investigación, incluido el uso de experimentos naturales y aleatorios, han demostrado aún más la importancia del periodismo.
Estos resultados, confirmarían su papel crucial en la sociedad y su papel fundamental en la educación del público, la lucha contra la corrupción y el desarrollo económico.
En este sentido, indicó que el periodismo de calidad es un bien público y necesita apoyo.
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Retos y regulaciones a la IA
La docente de la Universidad de Columbia en medios e innovación, destacó que los principales desafíos a los que se enfrenta la industria de los medios son el ascenso de populistas y demagogos al poder y los ataques al periodismo, las dificultades financieras y el auge de la IA generativa.
Ahondó en que a los periodistas en general les preocupa que el auge de la IA generativa signifique que la gente no busque noticias provenientes de medios acreditados y que lo que obtendrán sea mucha información de baja calidad proveniente de grandes modelos lingüísticos opacos.
Asimismo, preocupa cómo se les pagará a las organizaciones de noticias.
Respecto a la regulación del uso de la IA, ante el riesgo de que amplifique la desinformación, los contenidos falsos o deepfakes, la periodista neoyorquina, indicó que los gobiernos de todo el mundo están redactando leyes al respecto.
Agregó que otra forma de regulación que debe implementarse es la relativa a la falta de compensación adecuada a los creadores de la información y el conocimiento utilizados para formar a los modelos de aprendizaje profundo (Large Language Model, LLM, por sus siglas en inglés).
“Los pagos justos a editores y artistas ayudarán a salvaguardar el ecosistema informativo y cultural. Sin él, nos enfrentamos a un deterioro del modelo con consecuencias adversas potencialmente significativas”.
(Fuentes: La Nación y ADEPA)