La Sociedad Interamericana de Prensa (SIP) elevó este viernes una enérgica protesta por la desaparición forzada y posterior detención arbitraria de los periodistas venezolanos Carlos Marcano, Nakary Mena Ramos y del camarógrafo Gianni González, apresados en distintos operativos de seguridad en lo que va de 2025.
La organización regional alertó que los cargos de “instigación al odio”, “información falsa” y supuestos planes violentos, carecen de sustento jurídico y responden a un patrón de persecución contra la prensa independiente.
“La criminalización del periodismo crítico y el uso de figuras penales ambiguas como la instigación al odio son parte de un patrón sistemático de persecución contra quienes informan con independencia”, denunció José Roberto Dutriz, presidente de la SIP.
“Exigimos la liberación inmediata de Carlos Marcano, Nakary Mena Ramos y Gianni González, y que se respeten sus derechos fundamentales”, apuntó.
Por su parte, Martha Ramos, titular de la Comisión de Libertad de Prensa, dijo que la justicia se usa como herramienta de censura.
“Venezuela debe cesar estas prácticas represivas y cumplir con los estándares internacionales en materia de libertad de expresión y debido proceso”, ahondó.
Cronología de los hechos:
- Carlos Marcano, periodista de 30 años y docente universitario, fue arrestado sin orden judicial el 23 de mayo tras un allanamiento a su domicilio en Caracas. Permaneció 13 días desaparecido hasta que familiares confirmaron su traslado al penal de Tocuyito; al 10 de junio, su paradero sigue sin verificarse oficialmente. El ministro y dirigente oficialista Diosdado Cabello lo vinculó en TV con un supuesto complot para desestabilizar las elecciones regionales sin mediar proceso judicial.
- Nakary Mena y su esposo Gianni González fueron detenidos el 8 de abril luego de publicar un reportaje sobre el auge de la criminalidad en zonas populares de la capital. Tras 48 horas incomunicados, fueron imputados y enviados a los penales INOF y El Rodeo II, respectivamente. El portal Impacto Venezuela retiró el reportaje poco después de su arresto, presuntamente por presiones gubernamentales.
La Relatoría Especial para la Libertad de Expresión de la CIDH y organizaciones como IPYS Venezuela y Espacio Público coinciden en que los delitos invocados violan estándares internacionales y buscan silenciar el periodismo crítico.
El Colegio Nacional de Periodistas contabiliza 16 trabajadores de prensa detenidos desde las elecciones presidenciales de julio de 2024, cifra que evidencia la escalada represiva.