El Instituto Internacional de Prensa (IPI, por sus siglas en inglés) exhortó a la administración de Donald Trump a revertir su decisión de excluir a la agencia de noticias Associated Press (AP) de eventos en la Casa Blanca y de los viajes en el Air Force One.  

El IPI condenó la medida, calificándola como un intento de castigar a una de las principales agencias de noticias del mundo por ejercer su independencia editorial.

"Esta acción se enmarca en un contexto de crecientes presiones contra la libertad de prensa en Estados Unidos", señaló la organización.  

La decisión de la Casa Blanca se produjo luego de que AP mantuviera el uso del término "Golfo de México" en su guía de estilo, en lugar de adoptar la denominación "Golfo de América", promovida por el presidente Trump a través de una orden ejecutiva.

La agencia explicó que, si bien reconocería la nueva designación en contexto, seguiría utilizando el nombre internacionalmente reconocido para garantizar la claridad de la información a sus audiencias globales.  

Como consecuencia, la Casa Blanca prohibió la presencia de corresponsales de AP en un evento en la Oficina Oval y, posteriormente, denegó el acceso de un reportero y un fotógrafo de la agencia a un viaje presidencial en el Air Force One.

Funcionarios del gobierno acusaron a AP de difundir "mentiras" y "desinformación" al seguir utilizando la nomenclatura anterior.  

Preocupación por la libertad de prensa

Julie Pace, editora ejecutiva de AP, expresó su preocupación ante estas restricciones y enfatizó la importancia del periodismo independiente.

"Es alarmante que la administración Trump castigue a AP por su cobertura. Restringir nuestro acceso en función del contenido de nuestros reportes no solo limita el derecho del público a la información, sino que también vulnera la Primera Enmienda", afirmó.  

El director ejecutivo del IPI, Scott Griffen, se sumó a las críticas y exigió el restablecimiento del acceso de AP a la Casa Blanca.

"Ningún medio de comunicación debe enfrentar represalias por sus decisiones editoriales independientes. Estas restricciones injustificadas limitan la capacidad de AP para informar a millones de lectores en todo el mundo", indicó.  

Por su parte, John Daniszewski, presidente del Comité de América del Norte de IPI y ex vicepresidente de estándares de AP, consideró "extremadamente preocupante" que la Casa Blanca intente imponer terminología a un medio de comunicación. 

"Como agencia de noticias independiente, AP siempre ha reservado el derecho de elegir los términos geográficos más comprensibles para su audiencia global. La presión gubernamental sobre estas decisiones editoriales no solo socava la credibilidad de AP, sino también la posición de Estados Unidos como defensor de la libertad de prensa", advirtió.  

El IPI subrayó que estas restricciones se suman a un ambiente creciente de hostilidad contra la prensa en Estados Unidos, caracterizado por ataques verbales y acciones legales contra periodistas. 

La organización reiteró su llamado a la administración estadounidense para que respete el ejercicio del periodismo y garantice el acceso de todos los medios a la cobertura presidencial sin restricciones arbitrarias.