TUXTLA GUTIÉRREZ.- Seis presuntos autores materiales en prisión, ni un solo sindicado como intelectual, y una audiencia de juicio oral que se ha postergado más de lo debido, es parte del poco avance que se tiene luego de que este miércoles se cumplieran cuatro años del asesinato del periodista Mario Leonel Gómez Sánchez, quien recibió varios impactos de bala a las afueras de su casa en el municipio de Yajalón, Chiapas.
En entrevista exclusiva, Nancy Gómez, hermana del periodista y excorresponsal de periódicos como El Heraldo de Chiapas, advierte que este jueves se reanudará la audiencia que inició el pasado 17 de agosto, pero aún falta que pasen a declarar peritos de la Fiscalía General del Estado, entre otros.
Aunque entre los detenidos están Juan David “N”, alias “El Machaca”; Óscar “N”, “El Zapatudo”; Juan Pablo “N”, así como “El Kener”, “El Milo” y “El Chivo”, la declarante lamenta que las autoridades hayan desestimado una carpeta de investigación (CI) que se abrió en 2016 contra el político Rafael Guirao Aguilar quien, a través de uno de sus empleados, amenazó a Mario con “darle un levantón”.
Además, relata que a cada rato les han cambiado las fechas de las audiencias que, en principio, se efectuaban en Ocosingo, pero por problemas sociales u otras cuestiones como la pandemia, ahora se desarrollan en el Juzgado de Control y Enjuiciamiento, en San Cristóbal de Las Casas.
NI AVANCES, NI RASTROS
Lo que más le molesta y le desconcierta a la vez, acepta, es que el fiscal de Homicidios le aseguraba que ya tenían “pistas” de quién o quiénes serían los autores intelectuales, pero en la actualidad, revela, les han advertido que no hay avances en ese punto. “La Fiscalía sabe quién es, pero lo encubren, porque es un político”, asevera.
Aclara que en la carpeta de investigación que, en ese entonces, se inició contra Rafael Guirao, también había otros nombres de personajes que amenazaron a Mario, sin embargo, en la Fiscalía le dijeron que, como ya no vive el acusador, esa CI fue cerrada.
No obstante, Nancy argumenta que, en una recomendación (CEDH/13/2021) que ofreció el 20 de septiembre del año pasado, la Comisión Estatal de Derechos Humanos (CEDH), se les pide a las autoridades hacer valer esas declaraciones de Gómez Sánchez, dos años antes de su muerte.
De lo que ella está convencida, dice, es que el autor intelectual no caerá hasta que pierda poder, y prueba de ello, refiere, es que la Fiscalía agotó la inercia de investigar más. “Todo se estancó, ya no tiene más información”.
Asimismo, espera que el juez que tiene el caso, Armando Morales Juárez, se dirige conforme a la ley y se haga justicia.
Entre otras situaciones, comenta que de igual manera las medidas cautelares se han “relajado” y ella, como su familia, están más vulnerables, sobre todo porque se está en la parte final del proceso contra los seis imputados por el asesinato.
Incluso, deja en claro que en la Comisión Estatal de Atención a Víctimas (CEAV) también ha habido “burocratismo”, mientras que, en la parte federal, ocurre lo mismo. “No he recibido ninguna llamada”.
De esta instancia, detalla, requieren de la atención psicológica, la cual también recibieron “a medias”, sobre todo su hijo pequeño, quien fue testigo presencial del crimen. “Y mi hijo mayor estaba cerca del monitor donde se ve la cámara que tenía Mario en la casa”.
Texto publicado originalmente en La Silla Rota
(djh)
