Organizaciones en defensa de la libertad de prensa y de derechos humanos advirtieron que los cargos bajo la Ley de Espionaje que liberaron a Julian Assange, pudieran sentar un precedente peligroso para los periodistas.
A este respecto, la Asociación Mundial de Periódicos y Editores de Noticias (WAN-IFRA) y el Foro Mundial de Editores expresaron su preocupación por la continua criminalización del periodismo tras el acuerdo de culpabilidad alcanzado entre Estados Unidos y el fundador de WikiLeaks, Julian Assange.
“El acuerdo de culpabilidad establece un precedente potencialmente peligroso y, sin garantías adicionales, corre el riesgo de plantear una amenaza significativa para los periodistas y denunciantes que obtienen o divulgan información de interés público,” dijo WAN-IFRA en un comunicado.
Después de declararse culpable de un único cargo bajo la Ley de Espionaje por conspirar para obtener y difundir ilegalmente información clasificada de defensa nacional, Assange fue liberado y regresó a Australia.
Originalmente, se enfrentaba a una acusación de 17 cargos bajo la Ley de Espionaje y un cargo bajo la Ley de Fraude y Abuso Informático en relación con la publicación por parte de WikiLeaks de material clasificado, incluidos los registros de la guerra de Irak. De haber sido condenado, enfrentaba 175 años de prisión.
Delimitar los alcances
Para delimitar el alcance de futuras acciones contra periodistas, derivado del acuerdo de declarar culpable a Assange de un único cargo bajo la Ley de Espionaje, grupos de derechos humanos y libertad de prensa pidieron al gobierno de Estados Unidos que declare públicamente que no perseguiría a periodistas por llevar a cabo su trabajo.
Esto incluye la garantía de que los periodistas no estadounidenses estarían protegidos bajo la primera enmienda, que protege la libertad de expresión en Estados Unidos.
Actualmente, la primera enmienda no protege a los periodistas de otros países.
“La legislación de seguridad nacional se utiliza o interpreta con frecuencia para silenciar el periodismo y criminalizar a los periodistas; para las organizaciones de medios, puede ser un campo minado regular navegar por las muchas disposiciones que contiene dicha legislación”, indicó WAN-IFRA.
Asimismo, la Asociación consideró que la aplicación generalizada de este tipo de leyes, originalmente diseñadas para combatir el terrorismo, proteger los intereses nacionales y garantizar la seguridad pública, deja abierto el camino a abusos impactantes.
“Hacemos un llamado a Estados Unidos y a otros gobiernos para que brinden firmes garantías de que el periodismo de interés público será reconocido y protegido como tal y, en el futuro, los periodistas y el acto de hacer periodismo no serán considerados una amenaza para la seguridad nacional”, puntualizó WAN-IFRA.