El diario estadounidense The Washington Post canceló un pedido publicitario relacionado con la campaña “Despide a Elon Musk”, promovida por las organizaciones Common Cause, el Southern Poverty Law Center Action Fund y End Citizens United, lanzada el 3 de febrero.
La organización Common Cause informó a la publicación The Hill que había firmado un acuerdo con el Post por un monto de 115 mil dólares para la publicación de un anuncio de envoltura en la portada, contraportada y una página interior del periódico.
Sin embargo, tres días después de enviar el diseño, el medio canceló la publicación en el formato solicitado, ofreciendo en su lugar la posibilidad de ubicarlo dentro del periódico.
El anuncio incluía una imagen de Musk riendo, junto con un montaje de la Casa Blanca y un mensaje en letras grandes que cuestionaba: “¿Quién gobierna este país: Donald Trump o Elon Musk?”.
En la parte inferior, un texto adicional señalaba: “Desde el primer día, Elon ha creado caos y confusión y ha puesto en riesgo nuestro sustento. Y no rinde cuentas ante nadie más que él mismo. La Constitución solo permite un presidente a la vez. Llama a tus Senadores y diles que es momento de que Donald Trump despida a Elon Musk”.
Al final del anuncio se incluía la dirección del sitio web FireMusk.org.
Un segundo creativo mostraba una imagen de Musk con la leyenda “Nadie eligió a Musk para ninguna oficina”.
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Virginia Kase Solomón, presidenta de Common Cause, cuestionó la decisión del Post, señalando que el diario no proporcionó una explicación clara sobre la cancelación del formato original.
La organización también ha reunido más de 60 mil firmas en una petición en protesta contra Musk y su influencia en el gobierno federal.
Las políticas de publicidad de The Washington Post establecen que los anunciantes deben cumplir con las normativas aplicables a la publicidad política, incluyendo requisitos de responsabilidad obligatoria.
Además, el medio se reserva el derecho de solicitar pruebas que respalden afirmaciones fácticas y exige que los anunciantes obtengan los permisos necesarios cuando se utilicen nombres o imágenes de personas públicas.