En las elecciones de este año se documentaron 100 agresiones contra la prensa en México por parte de la Red Rompe el Miedo (RRM).
Las principales agresiones registradas fueron intimidación y el hostigamiento, el bloqueo o alteración de contenido, las amenazas, y el uso ilegítimo del poder público.
De las 100 agresiones, 41 ocurrieron antes del día de la jornada electoral, 39 el mismo día de la elección, y 20 durante el período post-electoral.
Las entidades con mayor número de agresiones fueron Guanajuato, Sinaloa y Puebla.
El informe indica que estados como Zacatecas y Chiapas mostraron una “preocupante ausencia de denuncias, lo que podría indicar un entorno de censura y autocensura entre las personas periodistas locales”.
De acuerdo con el informe, México sigue siendo uno de los países más peligrosos para ejercer el periodismo, con un índice de impunidad en crímenes contra la prensa del 89.17%.
Destaca que el Estado y miembros de partidos políticos fueron los principales perpetradores con el 43% del total de ataques contra las personas periodistas, lo que agrava la situación de vulnerabilidad para quienes ejercen la labor.
“En los periodos electorales, la violencia hacia la prensa tiende a intensificarse, en abierta contradicción con los principios democráticos", exponen los autores del informe.
"Estos momentos, que deberían fortalecer la libertad de expresión y el acceso a la información, se convierten en escenarios de mayor hostilidad hacia quienes ejercen el periodismo, comprometiendo su labor y poniendo en riesgo la integridad de la democracia”, agregan.
Violencia político-criminal al alza
En México, en los últimos años la violencia ha caracterizado diversas coyunturas electorales.
Esta ‘violencia político-criminal’ incluye amenazas, asesinatos, ataques armados, desapariciones y secuestros en contra de periodistas y personas que se desempeñan en el ámbito político, gubernamental o contra instalaciones de gobierno o de partidos políticos por parte de grupos de la delincuencia organizada, que ocurren antes, durante y después de procesos electorales.
Las elecciones de 2018 habían sido las más violentas de la historia del país, sin embargo, la falta de acciones de atención y prevención por parte de los gobiernos estatales, locales y federal, ésta continuó creciendo.
"La violencia contra personas candidatas y funcionarias se inserta en un contexto de alta hostilidad en la que personas que ejercen el derecho a informar se convierten también en objetivos de violencia, pues los costos políticos de investigaciones periodísticas cobran mayor relevancia en contextos electorales", señala el informe.
En 2015, durante los primeros comicios federales ocurridos durante el gobierno del entonces presidente Enrique Peña Nieto, ARTICLE 19 documentó un incremento de 50% de ataques contra la prensa.
Desde entonces la Red se ha activado en las elecciones de 2015, 2016, 2017, 2018, 2019, 2021, 2022 y 2023 documentando un total de 417 agresiones contra periodistas y medios de comunicación.
La RRM se activó del 1 de marzo al 1 de julio de 2024 y operó con 8 centros de monitoreo estatales en Chiapas, Chihuahua, Coahuila, Guanajuato, Jalisco, Oaxaca, Sinaloa y Quintana Roo, con el apoyo de organizaciones aliadas como el Border Center for Journalists and Bloggers, Comunicación e Información de la Mujer A.C. (CIMAC), Propuesta Cívica, Toma tu Remo y PERTENECES.
